El Poder Judicial, emitió una orden de aprehensión contra Rufino J.R. y Flor I.P., director y maestra de la Escuela Primaria Benito Juárez de la localidad de Xitzo, en Santiago de Anaya, Hidalgo por el delito de homicidio culposo por comisión de omisión tras la muerte del niño Adriel Moreno Mejía.
El menor de 11 años falleció el pasado 12 de marzo tras ser víctima de bullying por parte de dos de sus compañeros y la negligencia de las autoridades escolares en Hidalgo.
La jueza de control, adscrita al Tercer Distrito Judicial de Tula de Allende, emitió la orden de aprehensión. Los señalados son investigados como parte de las indagatorias en curso relacionadas con el expediente penal 131/2024.
El 15 de marzo, Obed Moreno Salvador, padre de Adriel, tuvo una reunión con el titular de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJEH), Francisco Fernández Hasbun.
Al salir del encuentro, acompañado por sus abogados, expresó confianza en las autoridades y su compromiso de lograr justicia por la muerte de su hijo.
Por otro lado, evitó proporcionar detalles adicionales sobre el progreso de la investigación para no interferir con las diligencias.
Asimismo, los asesores legales reconocieron que, dado que los presuntos responsables del incidente son menores de edad, su conducta no puede sancionarse legalmente.
En cambio, investigan al director y a la maestra de la primaria, debido a que hubo negligencia. Asimismo, porque presuntamente intentaron encubrir la muerte del menor
De acuerdo con los reportes, al niño Adriel lo agredieron dos de sus compañeros al interior del salón de clases el pasado 7 de marzo. Esto durante la ausencia de la maestra.
En tanto, el director Rufino J.R. y la maestra Flor I.P. están prófugos, según advirtió la familia de Adriel. En redes sociales, habitantes de Santiago de Anaya difundieron la imagen de los señalados para dar con su paradero.
La muerte de Adriel en escuela primaria de Santiago de Anaya
El 12 de marzo pasado, Adriel Romero Mejía falleció en el Hospital General de Actopan a causa de un severo traumatismo craneoencefálico grado III, acompañado de un hematoma subdural izquierdo, sangrado gástrico y una fractura de clavícula izquierda.
Los padres del niño Adriel señalaron que la muerte de su hijo fue resultado del bullying de sus compañeros en la Escuela Primaria Benito Juárez en Santiago de Anaya, Hidalgo.
Afirmaron que Adriel les dijo, antes de ser internado, que dos de sus compañeros lo tiraron al suelo y lo golpearon en repetidas ocasiones.
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También mencionaron que el director, Rufino N., lo levantó bruscamente después del incidente y lo subió a su vehículo para luego entregárselo.
Asimismo, informaron que le realizaron radiografías que confirmaron una fractura en la clavícula.
Sin embargo, el niño continuaba quejándose de dolores de cabeza y finalmente perdió el conocimiento. Lo ingresaron en el Hospital General de Actopan el 7 de marzo, donde falleció cinco días después tras permanecer en coma.
A pesar de las afirmaciones de los padres, la Secretaría de Educación Pública (SEP) de Hidalgo declaró que la muerte del niño no fue consecuencia de acoso escolar, sino de un accidente. Lo anterior, conforme a la versión dada por el director y la maestra de dicha escuela.
Sin embargo, la dependencia expresó su tristeza por el incidente y reiteró su apoyo a la familia de Adriel.
En cambio, la Procuraduría de Hidalgo advirtió que iniciarían una investigación. Esta derivó en la orden de aprehensión mencionada.
Cabe señalar que, durante la mañana del 14 de marzo, familiares y vecinos despidieron a Adriel en una misa de cuerpo presente.
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