Un total de 56 familias que residen en el fraccionamiento Villa Elena, situado en la colonia La Calera en Mineral de la Reforma corren el riesgo de perder sus casas. Esto debido a un conflicto legal relacionado con el terreno donde construyeron sus viviendas.
Según relatan las familias, hace cuatro años descubrieron que sus casas se encontraban en medio de un litigio debido a que la Constructora Azarías edificó en un terreno ejidal invadido.
De acuerdo con La Silla Rota, varios de los afectados contrajeron créditos hipotecarios de hasta 300 mil pesos para comprar una casa en dicho fraccionamiento. Sin embargo, la empresa constructora invadió el terreno y la dueña ya lo reclamó.
“Estamos preocupados por cómo nos vendieron las casas, desde 2012 hemos pagado el agua, la luz, el predial, pero aun así ya ganó el dueño del terreno y buscamos una solución”,
Los afectados manifestaron su preocupación y buscaron apoyo y orientación acercándose a diversas instituciones, sin embargo, no han recibido respuesta.
Autoridades no dan respuesta por fraude en casas en Mineral de la Reforma
Las familias afectadas han tratado de buscar soluciones y han tocado puertas en diversas instancias gubernamentales como el Tribunal Agrario. También en la Presidencia Municipal de Mineral de la Reforma, el Poder Judicial de la Federación y la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo.
Sin embargo, el Ministerio Público les explicó que para denunciar el delito de fraude, se debería haber hecho dentro del primer año a partir de que se enteraron de las anomalías.
La situación se ha convertido en un pleito entre los afectados y la verdadera dueña del terreno. En tanto, la constructora Azarías, responsable de las viviendas, desapareció.
La firma dejó únicamente a María Verónica Hernández Valdez como enlace, quien fuera la vendedora de las casas en aquel entonces.
Los afectados además dijeron mantener las hipotecas con el ISSFAM y Banjército, ya que la mayoría de los afectados son familias de militares. Sin embargo, el litigio continúa y la incertidumbre sobre la posibilidad de perder sus hogares les afecta profundamente.
Varios de los afectados incluso revelaron que ya hubo casos donde la dueña del predio invadió algunas casas e intentó venderlas o rentarlas.
Al final, las y los vecinos externaron su preocupación debido a que no tienen escrituras, por lo que temen perder su patrimonio.
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