El gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca Salazar, firmó el Acuerdo Nacional por el Derecho al Agua y Sustentabilidad, con el cual, el gobierno federal iniciará la ejecución del Plan Nacional Hídrico, mismo que contempla el saneamiento del Río Tula.
Este 25 de noviembre, el mandatario hidalguense acudió al encuentro en el Parque Ecológico de Xochimilco de la Ciudad de México, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo,
Al evento asistieron representantes de los 32 estados, agricultores, empresarios, académicos y comunidades indígenas. Según el gobierno federal, el Plan Nacional Hídrico busca garantizar el acceso al agua y priorizar el saneamiento de ríos.
Entre las prioridades, destacan el rescate de las cuencas de los ríos Tula, Lerma y Atoyac, pues sis malas condiciones afectan a más de 100 municipios.
Con esta firma, el gobierno de Hidalgo se comprometió a trabajar con la federación en el Plan Hídrico Nacional para el saneamiento del rio Tula.
Este proyecto clave busca eliminar las fuentes de contaminación, regular descargas residuales y proteger al medio ambiente y la salud de las comunidades cercanas.
Desde el pasado 21 de noviembre, el gobierno de Claudia Sheinbaum anunció que el saneamiento del Río Tula era una prioridad del Plan Nacional Hídrico.
El Río Tula enfrenta altos niveles de contaminación por desechos industriales y aguas residuales provenientes de la Ciudad de México y el Estado de México.
En este sentido, la presidenta Claudia Sheinbaum destacó que un río contaminado afecta tanto los recursos naturales como la salud de las poblaciones.
¿En qué consiste el Plan Nacional Hídrico?
El Plan Nacional Hídrico busca mejorar la distribución de agua en zonas de mayor escasez a través de diversas modificaciones en concesiones.
También, mejorando el tratamiento del recurso hídrico, para lo cual destinará más de 21 mil millones de pesos. Las unidades de riego también canalizarán agua para consumo humano en zonas de alto estrés hídrico.
El Plan Nacional Hídrico propone ordenar las concesiones y tecnificar el riego agrícola. Asimismo, desarrollar infraestructura hídrica que atienda las necesidades a largo plazo.
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Según el Gobierno de Hidalgo, unidades de riego y el sector industrial ya devolvieron más de 2 mil 500 millones de metros cúbicos de agua concesionados. Dicho recurso será destinado a zonas con mayor riesgo de sequía en el país.
De igual forma, varias empresas devolverán 126 millones de metros cúbicos de agua de los contratos que tienen para su uso.
Durante la firma del acuerdo, Claudia Sheinbaum enfatizó que el agua ya no será vista como una mercancía, sino como un bien nacional y un derecho humano. Dijo que este enfoque busca superar prácticas extractivistas del pasado y fomentar un manejo sustentable del recurso.
Finalmente, la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Alicia Bárcena Ibarra, señaló que trabajarán en la reforestación, restauración de suelos y recuperación de humedales en cuencas de agua.
En cambio, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) tendrá la tarea de garantizar un suministro adecuado, sustentable y de calidad.
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