Adolf Hitler, líder del Partido Nazi y Führer de Alemania de 1921 a 1945, mandó a realizar un documental sobre el pulque en Hidalgo, ya que creía en sus propiedades divinas.
Hitler solicitó información a su círculo más cercano, pues pensó que podía aportar un sinfín de beneficios a su salud y a la consecución de la raza aria. Tras esto, ordenó la creación del material donde se apreciara la producción de la bebida consumida por los mexicanos.
La única copia existente de este documental es propiedad del coleccionista mexicano, Javier Gómez, quien según información de “El Universal”, adquirió por 700 dólares en una subasta. El filme se encontró en un centro cultural de Berlín.
El coleccionista señaló que desde hace siglos se sabe que el pulque es una “bebida asombrosa” y que creer que era una medicina natural “les llamó mucho la atención” a los nazis.
El documental lleva como nombre “La producción del Pulque en México”, fue filmado en el año de 1938 y tiene una duración de 12 minutos. Dicho filme estuvo a cargo del director de cine Hubert Schonger, quien filmó en Hidalgo el proceso de extracción y consumo del pulque por los tlachiqueros que extraen el aguamiel.
El coleccionista dijo que los alemanes estaban buscando “la piedra filosofal, el agua de la juventud” para Adolf Hitler en varios lugares del mundo.
Cabe mencionar que este documental tuvo proyecciones en México durante un congreso de pulque y durante un estudio realizado por la Universidad Nacional Autónoma de México.
¿Qué es el pulque y para qué sirve?
El pulque es una bebida alcohólica tradicional mexicana que se obtiene de la fermentación del jugo o aguamiel del maguey (también conocido como agave). Es una bebida prehispánica que ha sido consumida en México durante siglos.
El proceso de elaboración del pulque comienza con la extracción del aguamiel, que es el jugo dulce que se encuentra en el corazón del maguey. Este líquido se recoge en vasijas especiales y luego se fermenta de manera natural gracias a las levaduras presentes en el ambiente.
Durante la fermentación, el aguamiel se convierte en una bebida ligeramente alcohólica, con un sabor característico. Este puede variar desde dulce hasta un poco ácido, dependiendo del tipo de maguey y del proceso de fermentación.
El pulque se consume comúnmente en estado fresco y se sirve en bares o establecimientos conocidos como “pulquerías”.
Tradicionalmente, se bebe en tazas de cerámica llamadas “jarros” o “jícaras”. Es importante mencionar que el pulque es una bebida relativamente baja en alcohol en comparación con otras bebidas alcohólicas, como el tequila o la cerveza.
Te puede interesar:
dando clic en el periódico