La Secretaría de Seguridad Pública (SSPH) detuvo al exdirector de la Policía de Ajacuba, identificado como E.I.S.B., por el delito de cohecho agravado al haber aceptado sobornos cuando ya ejercía como policía estatal de Hidalgo
A través de un comunicado, la dependencia informó sobre la aprehensión del sujeto, quien se desempeñaba como elemento de la Agencia de Seguridad Estatal después de haber sido director en Ajacuba.
Tras atender una denuncia presentada en la Unidad de Asuntos Internos, iniciaron la investigación correspondiente. Para ello, dieron parte al Ministerio Público de la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción.
De esa forma, determinaron que E.I.S.B. había aceptado un soborno como agente de la Policía Estatal de Hidalgo. Con las pruebas aportadas, un juez lo vinculó a proceso.
La dependencia dijo que no habrá impunidad en los “actos de corrupción o indisciplina de los agentes adscritos”.
De nueva cuenta, la SSPH hizo un llamado a la ciudadanía para denunciar cualquier acto de corrupción o abuso al correo supervisionssp@hidalgo.gob.mx o al número 771 437 1422.
Los abusos de la Policía Estatal y Municipal de Hidalgo
Los elementos de la Policía Estatal no son los únicos que cometen atropellos en Hidalgo. En los últimos días, se registraron distintas agresiones por parte de elementos municipales.
En un video, captaron a dos policías de Zacualtipán dando puñetazos, patadas y cachetadas a un adulto mayor. Lo empujaron varias veces contra la pared para después subirlo a la batea de una patrulla y llevárselo.
De acuerdo a versiones de los testigos, los uniformados aseguraron al hombre presuntamente por haber cometido una falta administrativa. Señalaron que según estaba estaba alterando el orden público, pues se encontraba en estado de ebriedad.
Por otra parte, el pasado 18 de julio, vecinos de la privada Río Nazas, en Mineral de la Reforma, grabaron a un policía municipal que los amenazó con pistola en mano.
Primero, hubo una riña entre varias mujeres en la que intervino el oficial con insultos y agresiones. Uno de los habitantes lo cuestionó por su comportamiento, pero el policía lo empujó y amenazó con el arma.
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