La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales del Estado de Hidalgo (Semarnath) informó que removió el 99 por ciento del lirio acuático en la presa Endhó, situación que permitirá reducir la contaminación de este cuerpo de agua
En un comunicado, la dependencia indicó que la presa tiene una capacidad de almacenamiento de 182 millones de metros cúbicos de agua y cuenta con una superficie de mil 260 hectáreas.
Desde agosto pasado, brigadistas realizaron un control exhaustivo del lirio acuático, mediante métodos mecánicos y manuales. Estos trabajos permitieron un control efectivo y la remoción del lirio acuático en casi la totalidad de la Presa Endhó. Esta especia vegetal contribuía a contaminar el agua que se almacena en dicho espacio.
Semarnath estableció que un equipo de especialistas realice un monitoreo y control, para asegurar el buen funcionamiento de la presa. Dichas acciones, en coordinación con las autoridades municipales de Tula de Allende, Tepetitlán y comunidades ribereñas, durarán hasta diciembre de este 2024.
La Presa Endhó forma parte de la Región Hidrológica Núm. 26 Pánuco. Además, desde 1973 la presa recibe aguas residuales del Valle de México.
La elevada contaminación de presa Endhó y escuelas de Tula de Allende
La presa Endhó recibe aguas residuales del Valle de México, por lo que presenta altos niveles de contaminación, sumado a la presencia del lirio acuático. Esto representa un riesgo significativo para la salud de los habitantes de la región de Tula de Allende y municipios cercanos.
Además, la actividad industrial generó la presencia de partículas contaminantes en el aire, afectando varias escuelas de la zona.
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Según el “Estudio técnico justificativo para declarar Zona de Restauración Ecológica el área de afluencia de la presa Endhó”, la región sufre diversos tipos de contaminación.
Estas son producto de actividades industriales como la producción de cemento, químicos, metales, energía y petróleo, además de la operación de rellenos sanitarios y tiraderos a cielo abierto. Se suman las descargas de aguas negras provenientes de sistemas como el Gran Canal del Desagüe, el Interceptor Poniente y el Emisor Central.
El estudio técnico incluye otros análisis previos realizados por diversas dependencias, así como muestreos y pruebas de laboratorio efectuados por la Semarnath que evalúan la calidad del agua, el aire y el suelo en la región.
El objetivo de dicho estudio es declarar a Tula de Allende y sus alrededores como Zona de Restauración Ecológica. Esto a fin de implementar medidas urgentes para mitigar la contaminación.
Además, abarca los daños en municipios vecinos como Atitalaquia, Atotonilco de Tula, Tepeji del Río, Tepetitlán, Tezontepec de Aldama, Tlahuelilpan y Tlaxcoapan.
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