El PRI en Hidalgo arrancó su operación cicatriz con un llamado a la unidad desde la dirigencia estatal. En su primer mensaje formal, Marco Antonio Mendoza Bustamante pidió a la militancia unirse para recuperar la “grandeza” del tricolor en la entidad, tras la desbandada de simpatizantes que ahondó la crisis interna.
El también diputado federal dijo que el pasado 22 de junio asumió formalmente como presidente del Comité Directivo Estatal (CDE). A través de un video, dijo que está convencido de que “la fuerza del PRI somos todas y todos”.
Igual que hizo la dirigencia nacional de Alejandro Moreno Cárdenas —a la cual es cercano—, Marco Antonio Mendoza dijo que el partido no pertenece a un grupo en específico, con relación a quienes se fueron por falta de espacios.
Resaltó que el tricolor es de todos los sectores “que tocan las puertas y piden el voto en las calles”. Además, hizo un llamado a que “todos y todas construyamos el mejor PRI Hidalgo de todos los tiempos. Con orden, profesionalismo, trabajo, innovación, cercanía e inclusión”.
Por su parte, la nueva secretaria general, Jenny Márquez Méndez destacó que convocarán a los hidalguenses a sumarse a ellos y “trabajar” en conjunto. Con esto, el PRI Hidalgo inició oficialmente su operación cicatriz.
“Queremos trabajar con ustedes para recuperar la grandeza de nuestro partido en Hidalgo. Esta es tu casa, es la casa de todas y todos los priístas. Las puertas están abiertas en el PRI y cabemos todos”.
Marco Antonio Mendoza y Jenny Márquez buscan recuperar la “grandeza” perdida del tricolor. “El PRI construyó Hidalgo y lo volveremos a hacer”, dijeron al mismo tiempo.
¿Por qué el PRI Hidalgo inicia su operación cicatriz?
El pasado 20 de junio, diputadas y diputados locales anunciaron su renuncia al partido. También dejaron las filas más de 16 miembros del Comité Directivo Estatal (CDE).
Lo hicieron también siguiendo al exgobernador Omar Fayad Meneses, quien dejó las filas el 13 de junio. El exmandatario mencionó que había pocas posibilidades de participación política con Alejandro Moreno y Carolina Viggiano.
Al respecto, el presidente nacional del Partido Revolucionario, Alejandro Moreno criticó duramente a los renunciantes diciendo que ellos ya no respondían a los intereses del partido. Aseveró que la renuncia del exgobernador y de los ahora expriístas las tenía “en el bote de la basura”
Por otra parte, uno de los “amigos” de Omar Fayad, el senador Ricardo Monreal Ávila, aplaudió la decisión del exmandatario. Durante su visita a Pachuca como “corcholata” de Morena se dijo “sorprendido” de esta ruptura en el tricolor de Hidalgo.
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