La cooperativa Cruz Azul anunció que suspenderá el pago de salarios a casi tres mil trabajadores de su planta cementera en el municipio de Tula de Allende, la cual lleva casi tres años en paro.
En un comunicado, el Consejo de Administración informó que, durante este periodo de conflicto, ha cumplido de manera ininterrumpida con los pagos a 2 mil 812 empleados.
Sin embargo, detalló que, a partir del 1 de febrero, dejará de cubrir los salarios debido a la crisis financiera derivada de la falta de producción en la planta.
La cooperativa Cruz Azul detalló que en estos tres años de inactividad en su planta cementera de Tula de Allende han destinado 200 millones de dólares, equivalentes a 4 mil 105 millones de pesos, para cumplir con el pago a los trabajadores. Esto sin poder recuperar dicha inversión en ganancias.
El comunicado también está dirigido a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo. Asimismo, al gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca Salazar, así como al presidente municipal de Tula de Allende, Cristhian Evanivaldo Martínez Reséndiz, entre otras autoridades.
La cooperativa señaló que está dispuesta a contratar nuevamente a trabajadores ajenos al conflicto, una vez que logren recuperar la planta en Tula de Allende. Sin embargo, no especificó una fecha para ello.
Acusan al Gobierno de Hidalgo por falta de colaboración
El Consejo de Administración de Cruz Azul también criticó al gobierno de Hidalgo por no emitir órdenes de aprehensión contra los trabajadores que mantiene ocupadas las instalaciones de la cementera.
Señalaron que esta falta de acción impide la recuperación del inmueble, prolongando el conflicto y la imposibilidad de cumplir con los pagos a los trabajadores.
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Asimismo, acusaron a las autoridades municipales de no brindar apoyo en la protección de las instalaciones. Señalaron que esto derivó en actos de vandalismo y robo al interior de la planta en Tula de Allende.
Los problemas en la planta cementera Cruz Azul en Tula de Allende
El conflicto en la planta cementera Cruz Azul de Tula de Allende inició en 2010 tras diferencias entre Federico Sarabia Pozo; su excolaborador, Billy Álvarez Cuevas; y el actual Consejo de Administración.
Sin embargo, la pugna escaló en 2022, cuando Federico Sarabia y varios trabajadores desconocieron a Víctor Manuel Velázquez como presidente del Consejo de Administración de la Cooperativa.
En abril de ese año, el grupo de Federico Sarabia tomó las instalaciones de la cementera en Tula de Allende por la fuerza. Este hecho dejó un saldo de ocho personas fallecidas.
Tras eso, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) cortó el suministro de energía eléctrica en dicho complejo debido a un adeudo millonario de luz. Eso impidió que el grupo de Federico Sarabia pudiera producir cemento, por lo que las actividades están detenidas hasta la fecha.
El 23 de septiembre de 2024, más de 200 personas originarias del Estado de México ingresaron a la planta en Tula de Allende con la intención de recuperarla.
Tras ingresar, los sujetos realizaron varios disparos de arma de fuego. Esto provocó un enfrentamiento con el grupo de Federico Sarabia que mantiene las instalaciones tomadas.
Después de una hora, agentes de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) llegaron para controla la situación. El saldo fue de 20 personas heridas y 120 detenidas.
Presuntamente, el Consejo de Administración de Cruz Azul había enviado al grupo armado para recuperar las instalaciones. Sin embargo, el Consejo emitió un comunicado para deslindarse de los hechos.
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